Las piezas encajan: la tesis fiscal sobre mafia en el MTC empieza a tomar fuerza
Redacción Vigilante
Publicado 5:00 pm, 10 mayo, 2022
Tres colaboradores y testigos claves confirman detalles y entregan evidencias de cómo se direccionaban obras públicas del MTC a favor de consorcios chino-peruanos a través de una red que encabezaría el presidente Pedro Castillo e integrarían sus sobrinos Fray Vásquez y Gian Marco Castillo, el exministro Juan Silva y el empresario Zamir Villaverde, entre otros.
A finales del año pasado, la lobista Karelim López denunció una presunta mafia enquistada en el Ministerio de Transportes y Comunaciones (MTC) para direccionar obras públicas a favor de empresas chinas y peruanas. Lo hizo cuando decidió acogerse a un proceso de colaboración eficaz, porque había participado, como representante de una empresa, en la irregular licitación del proyecto Puente Tarata II, en octubre del 2021, por S/232 millones.
Luego, en dos declaraciones testimoniales posteriores ante la fiscalía, en febrero y abril de este año, respectivamente, entregó más detalles y evidencias del tinglado de corrupción en el MTC que había denunciado y que conocía desde adentro, por su cercanía con Bruno Pacheco, el ex secretario de Palacio hoy prófugo de la justicia.
López Arredondo aseguró que la señalada organización criminal en el MTC la encabezaba el mismo presidente Pedro Castillo, junto con sus sobrinos Fray Vásquez y Gian Marco Castillo, el exministro Juan Silva y el polémico empresario Zamir Villaverde, sindicado como el operador de esta supuesta mafia.
Sindicaciones y confirmaciones
Entre los detalles que reveló la colaboradora eficaz están que las empresas chinas y peruanas que eran beneficiadas pagaban entre 5% y 10% del valor de cada obra que se les entregaba.
Según explicó Karelim López, Zamir Villaverde, quien llegó al círculo de confianza del presidente gracias a su amistad con Fray Vásquez, “era el que coordinaba con los comités, con la gente que ponía adentro del Ministerio de Transportes y Comunicaciones, porque el ministro (Juan Silva) no podía estar involucrado”.
Esa versión de la colaboradora eficaz fue confirmada con el testimonio de otro testigo clave de la justicia, José Cortegana, ex director de Provías, que declaró que Zamir Villaverde, quien hoy afronta prisión preventiva por 36 meses, era el operador del ministro Silva, tesis que ya la fiscalía maneja, y que lo presionó para que designe a un recomendado.
“Me habló del ingeniero Hugo Trece, a fin de que entre a trabajar a Provías a ocupar el puesto de subdirector de la Dirección de Conservación Vial”, contó Cortegana el 1 de abril pasado ante la fiscal de Lavado de Activos, Luz Taquire.
El exfuncionario precisó que conoció a Villaverde el 20 de septiembre de 2021, en la oficina del entonces ministro Juan Silva, quien le presentó al empresario y este le remarcó que era del círculo de confianza del presidente Castillo. Un día después, Villaverde empezó a presionarlo para que coloque al ingeniero Hugo Trece en Provías.
Como no cedió a las exigencias de Villaverde, Cortegana fue destituido del cargo, en el que duró solo dos semanas, del 16 al 28 de setiembre. Fue reemplazado por Jorge Ñahue, quien sí nombró al recomendado de Zamir Villaverde, el ingeniero Hugo Trece, como subdirector de Conservación de Provías, el 30 de setiembre.
Un tercer testimonio que refuerza la tesis fiscal de una mafia organizada en el MTC es el del colaborador eficaz identificado con la clave CE-01-5D-2FPCEDCF-2022, quien reveló que Hugo Meneses, empresario cusqueño vinculado a un consorcio chino peruano, participó en reuniones secretas con Villaverde, el ministro Silva y funcionarios de Provías para direccionar obras.
Además de ser un personaje cercano a Villaverde, Meneses Cornejo, un ingeniero de 51 años, es dueño y directivo de varias empresas inmobiliarias y registra visitas a Provías como representante del Consorcio Vial Samegua, integrado por la firma China Gezhouba Group Company y Corporación Imaginación S.A.C., de propiedad de Marco Pasapera, implicado en el caso Puente Tarata II.
“En agosto del año pasado, Hugo Meneses se comunicó con Alcides Villafuerte —gerente de Obras de Provías Descentralizado— vía telefónica por el aplicativo Telegram, y le solicitó que esperara en Lince, por la calle León Velarde, aproximadamente a las 8 p.m., porque un carro negro iba a recogerlo. Dicha citación era para sostener una reunión con el ministro del MTC [Juan Silva]”, declaró el citado colaborador eficaz en abril pasado.
Según ese testimonio, en aquel encuentro clandestino participaron el ministro Silva y el sobrino del mandatario Fray Vásquez, quien presentó a Villafuerte, entonces funcionario de Provías, como un “aliado”, mientras que el titular del MTC les dijo que “se tenía que sacar obras a favor de los empresarios”.
También reveló detalles de otra reunión, realizada en agosto del año pasado, cuando apenas se iniciaba el gobierno de Castillo. “A mediados de agosto del 2021, en la casa de Zamir Villaverde en La Planicie, La Molina, hubo una reunión entre él, Luis Pasapera, Hugo Meneses y Alcides Villafuerte. […] Villaverde dijo que tenía llegada con la familia presidencial, como Fray Vásquez, y que debía apoyarse a los empresarios con obras”, se lee en su declaración fiscal.
Las mentiras de Villaverde y Silva complican a Castillo
Así, las piezas del rompecabezas de la fiscalía empiezan a encajar. En la gestión de Juan Silva, ya investigado por la fiscalía de la Nación en virtud a su inmunidad, el MTC entregó 7 contratos por S/ 804,5 millones a 3 empresas chinas y 2 peruanas consorciadas.
Lo otro que las fiscales Karla Zecenarro y Luz Taquire han lograron establecer es que Silva y Villaverde, ambos cercanos al presidente Castillo, mintieron cuando negaron conocerse, tras cruzar información y corroborar las evidencias que entregaron los colaboradores eficaces y testigos sobre las coordinaciones entre ambos.
Es decir, Silva y Villaverde no solo se conocían, sino que, con aparente conocimiento de Pedro Castillo, coordinaban la adjudicación de obras del MTC, lo cual complica la situación política y legal del mandatario.
Otros hechos que refuerzan la tesis fiscal es que Silva, siendo ministro se reunió 33 veces con el presidente Castillo, más que cualquier otro miembro del gabinete. En tanto, Castillo mantuvo a Silva en el cargo lo más que pudo, siete meses en total, pese a que los cuestionamientos a su designación empezaron desde el primer día de su llegada al MTC, debido a sus graves antecedentes y a que no tenía la experiencia ni el perfil para el cargo; y apenas dos meses después de asumir la cartera, saltaron los primeros escándalos de copamiento e indicios de corrupción.
También está el hecho de que el empresario chino Li Qingyong, representante de China Civil Engineering Construction (CCECC), la empresa asiática que más contratos ganó mientras Silva estuvo en el MTC, vino a Lima cuatro veces. Para más señas, esas visitas coincidieron con las fechas en que su compañía se adjudicó 4 de los 7 contratos investigados.
Además, el 13 de enero de 2022, Li Qingyong se reunió con el congresista acciopopulista Raúl Doroteo, sindicado como parte de ‘Los Niños’. Un día después, el 14, Doroteo y sus colegas de la lampa también señalados de ser de ese grupo, se entrevistaron con el presidente Pedro Castillo en Palacio de Gobierno.
Otro detalle que no es menor: en el encuentro con el empresario chino, Doroteo estuvo acompañado de Alexander Aguilar Quispe, hermano de Roberto Aguilar Quispe, quien maneja la constructora Ingeniería Integración de Proyectos (INIP), empresa que firmó contratos con el Estado por más de S/580 millones en consorcio con China Civil Engineering Construction Corporation y CAMC Engineering CO. LTD.
La esposa de Alexander Aguilar Quispe también ganó un contrato con el MTC como representante del Grupo Constructor y Consultor Asociados, en consorcio con China Railway N° 10 Engineering Group.
Así, se observa una sospechosa coincidencia entre personajes y hechos en el periodo en que Provías entregó obras públicas a tres empresas chinas y dos peruanas consorciadas, tal como lo declaró en sus dos primeros testimonios la colaboradora eficaz Karelim López ante las fiscales Karla Zecenarro y Luz Taquire.