Ipsos: El 93% de peruanos no ve como prioridad una Asamblea Constituyente

¿Clamor popular? Última encuesta nacional de esta firma –realizada el 21 y 22 de abril– deja sin piso proyecto del presidente Pedro Castillo y Perú Libre. Ni siquiera en las regiones tiene respaldo la propuesta del gobierno para una nueva Constitución.

Sin piso. El premier Aníbal Torres y miembros de Perú Libre con Vladimir Cerrón a la cabeza no dicen la verdad cuando alegan que el proyecto para instalar una Asamblea Constituyente que presentó el presidente Pedro Castillo es un “clamor popular”.

La última encuesta nacional de Ipsos –realizada el 21 y 22 de abril– revela que para el 93% de peruanos no es una prioridad la instalación de un órgano encargado de redacte una nueva Constitución. Apenas un 7% respalda la cuestionada iniciativa del Ejecutivo, que no solo carece de respaldo popular y político, porque solo genera incertidumbre y no es viable, sino también tiene visos de inconstitucionalidad y partes plagiadas de un artículo académico que evidencian improvisación.

¿En qué se debe enfocar el gobierno? La última encuesta de Ipsos confirma lo que ya otros estudios han señalado, en el sentido de que las preocupaciones de la ciudadanía son distintas a las del presidente Castillo y sus aliados. Lucha contra la delincuencia es el principal reclamo de la gente, con 43%; le siguen la lucha contra la corrupción (42%); crear empleo y reactivar la económica (33%); reducir la pobreza (25%), controlar la inflación y el alza del costo de vida (25%); entre otros.

“La mayoría de la población está más preocupada en temas más concretos e inmediatos (…) El gobierno, al no poder enfrentar los problemas del presente, está tratando de distraer a la opinión pública, a la prensa y al Congreso con esta iniciativa que no tiene respaldo ni viabilidad”, sostuvo Alfredo Torres, presidente de Ipsos.

Agregó que el cambio de Constitución a través de una constituyente “solo le preocupa a un grupo muy politizado de la izquierda”, que cree que los problemas del Perú se van a corregir con la sola modificación del texto constitucional, cuando los hechos y la evidencia muestran que no es así.

Los efectos del caos y el desgobierno ya los percibe y siente la gente día a día, con el desabastecimiento de medicinas, los errores en el proceso de vacunación, la crisis documentaria en Migraciones, Reniec y el MTC, o en la incapacidad del gobierno para atender y resolver los conflictos sociales que han puesto en jaque la actividad minera, lo que provoca pérdidas millonarias al país.

El panorama no cambia en el interior del país ni en el sector rural, donde la posibilidad de instalar una Asamblea Constituyente tampoco es una urgencia y solo la respaldan un 7% y 8%, respectivamente. Ni siquiera es una “clamor popular” en el centro y sur del país, bolsones electorales de Perú Libre.

Para el analista político Rober Villalba, quien vive en Huancayo, la encuesta refleja que a los peruanos no les interesa el cambio total de la Constitución, porque “apenas estamos saliendo de una crisis sanitaria” y ahora en medio una fuerte crisis económica por el incremento del costo de vida. “Cuando la ciudadanía se distancia de los políticos, es porque estos no se preocupan por solucionar los problemas del día a día”, dijo en El Comercio.

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