Ejecutivo observa Ley de la Masificación del Gas: escandalosa decisión abre paso al conflicto de intereses y corrupción

La presidenta Dina Boluarte, de la mano de Óscar Vera, titular del Ministerio de Energía y Minas (Minem), observó el 4 de diciembre la Ley de masificación y solicitó cambios escandalosos que generan serios cuestionamientos. A ello se suma que la observación del Ejecutivo se da en medio de una polémica adenda que beneficiaría a una sola empresa, Cálidda.

ESCANDALOSAS OBSERVACIONES

La Ley aprobada por el Congreso tiene varios elementos positivos. Por ejemplo, se focaliza el subsidio hasta un tope de consumo de gas natural, de modo que se beneficien a las familias y pequeñas y medianas industrias en provincias. A ello se suma que las licitaciones para la masificación serán abiertas, transparentes y competitivas. Otra es que amplía la masificación a nivel nacional, para que más operadoras puedan postular a construir redes domiciliarias. Esto permitirá una mejor competencia y, por ende, un mejor servicio.

Pero el Ejecutivo observó la ley para solicitar cambios escandalosos e incluyeron que se pueda hacer un encargo especial para que empresas públicas se encarguen de operar la red de distribución del gas. Es decir, que le abren la puerta para que Petroperú pueda ser elegida a dedo. Cabe mencionar que la estatal evidenció un millonario malgasto de sus fondos y ni siquiera puede gestionar las actuales redes de gas que tiene en Arequipa, Moquegua y Tacna. Esto se refleja a que no ha ampliado ni un centímetro de red.

El otro punto escandaloso es que buscan incluir como beneficiarios del subsidio, que se generará a través de la Ley, a empresas grandes que consumen miles de metros cúbicos al mes y, evidentemente, no necesita del apoyo subsidiario. Esta decisión evidenciaría que el ministro Vera pretende incluir industrias o empresas grandes como beneficiarias, haciendo que los contribuyentes paguemos las cuentas de las empresas grandes.

A estas escandalosas observaciones se suman otras que presentó el Ejecutivo. Ante ello, el Congreso debe hacer respetar su decisión y promulgar por insistencia esta ley que sí busca beneficiar a los peruanos.

UNA OSCURA ADENDA

Cabe recordar que el pasado 14 de noviembre y con un total de 103 votos, el Congreso aprobó la Ley de la Masificación del gas, la cual permite la competencia entre empresas interesadas en el proceso y beneficiaría a millones de peruanos, pero el Ejecutivo no la promulgó.

Ese mismo día, el Minem presentó una dudosa adenda que beneficia a una sola empresa con la masificación del gas en siete regiones y la extensión del contrato en Lima y Callao. Se trata de la empresa, Cálidda. Una jugada en pared de la que el responsable sería el cuestionado ministro Vera.

A pesar de que el ministerio intentó desmarcarse del tema con un escueto comunicado donde explicaron que la adenda aún estaba en proceso, los hechos demostraron todo lo contrario, pues desde días antes ya habían firmado un convenio de cesión de terrenos con el Gobierno Regional de Ucayali y un día después de la presentación de la adenda se hizo lo propio con los gobiernos regionales de Cusco, Junín, Huancavelica y Ayacucho. Todo con una velocidad pocas veces vista en el Minem.