“Lo peor que podría pasarnos es una Mesa Directiva de alianza entre izquierda y derecha”

El escenario político sigue complicado y no parece mejorar. En medio de movilizaciones y una recuperación económica que poco a poco toma impulso, el Congreso deberá tomar una importante decisión al elegir, el próximo 26 de julio, a la nueva Mesa Directiva.

El bloque democrático del Parlamento, integrado por Alianza para el Progreso, Fuerza Popular, Avanza País y Renovación Popular, no lograba los votos necesarios para imponer una lista. Es por eso que se evidenció la intención de tener una alianza con alguna de las bancadas de izquierda como el Bloque Magisterial o Perú Libre. En tanto, otras bancadas ya habían perfilado a sus candidatos como Luis Aragón de Acción Popular o Gladys Echaíz de Renovación Popular.

Hoy, en medio de un tire y afloja de negociaciones, se presentó la primera lista integrada por Alejandro Soto (APP), Hernando Guerra Garcia (Fuerza Popular), Waldemar Cerrón (Perú Libre) y Rosselli Amuruz (Avanza País). La reacción de la izquierda fue rechazar de plano la propuesta, puesto que desde hace meses venían trabajando en bloque con Perú Libre.

El politólogo Javier Albán sostuvo que la decisión de establecer alianzas entre partidos de tinte conservador y de izquierda puede generar insatisfacción en la ciudadanía. “Lo peor que podría pasarnos sería una Mesa Directiva en la que se perciba una alianza entre Perú Libre y el espectro más conservador. Si sale una fórmula como esa, logrará el repudio de todos, porque los que votaron contra Pedro Castillo verán a la gente que ellos eligieron trayendo (a la Mesa Directiva) a personas con las que no comparten opiniones”, dijo a Vigilante.pe

En esa línea, agregó que una alianza como esa será vista como una continuación a la votación del nuevo titular de la Defensoría del Pueblo, en donde bancadas como Fuerza Popular le cedieron sus votos a un simpatizante del líder de Perú Libre, Vladimir Cerrón.

Asimismo, Albán aseguró que el Parlamento tiende a demostrar una idea errónea de democracia, debido a que toma decisiones sin brindar explicaciones que puedan generar simpatía con los votantes. Mencionó que no es posible aprobar reformas únicamente porque se cuentan con los votos, sino que se deben sustentar ante los ciudadanos.

“Tengo la percepción de que el Congreso entiende que la democracia es algo que ellos deciden. Te dan las reglas y tú las tienes que aplicar. Es algo que viene de arriba hacia abajo, pero la verdad es que hay que construir confianza, sobre todo, de abajo hacia arriba”, manifestó.

Finalmente, recomendó a los parlamentarios que escojan a aquellos representantes capaces de gestionar una crisis y de generar diálogo entre aquellos grupos o sectores con ideas polarizadas. “Que se elija a un grupo o presidente que tenga una mejor capacidad de dialogar, de conversar con la gente y de hacerse entender. Se debería elegir una fórmula en donde se perciba que el Congreso lo están intentando (generar consenso con la población)”, zanjó.