Editorial: Rectificación pendiente, por José Ignacio Beteta

El día de ayer (martes 12 de abril) el presidente Pedro Castillo me dirigió una carta notarial como director del proyecto Vigilante. En la carta, el presidente sostiene que el informe realizado por Vigilante realiza “imputaciones maliciosamente atribuidas por ustedes a mi persona el día domingo 10 de abril del presente año en el reportaje titulado “Pichanga Delatora””.

En primer lugar, Vigilante es responsable de la realización y redacción de un informe periodístico online titulado “Roberto Aguilar Quispe y la ‘Peña de los millones’”, que se puede encontrar haciendo clic aquí.

Vigilante no elaboró el reportaje televisivo emitido el día domingo. El reportaje televisivo fue elaborado por el equipo de producción de Panorama y Vigilante colaboró con la información vertida en su informe escrito y un conjunto de fotografías para que dicho reportaje se realice.

El informe escrito en ningún momento realiza imputación maliciosa alguna contra el presidente. El informe no tiene como centro de la investigación al señor Pedro Castillo, sino al empresario Roberto Aguilar Quispe, quien había negado su cercanía con el entorno presidencial. El problema es que un conjunto de fotografías pondría en cuestión su afirmación.

Por otro lado, Vigilante no afirma en ningún momento que la fotografía analizada del empresario revele alguna conexión ilegal o maliciosa con el presidente, simplemente la cercanía suficiente para que Aguilar Torres participe de un evento privado organizado por el entorno más cercano del señor Pedro Castillo.

Pero lo más importante es que el informe no asume o presume hechos o conexiones. Vigilante y Panorama solicitan la opinión de dos peritos profesionales y reconocidos, quienes concluyeron principalmente que la persona que aparece en una foto analizada coincide claramente con la identidad del señor Roberto Aguilar Quispe. En dicho sentido, es este empresario quien debería mostrar pruebas proporcionales, como por ejemplo la lista de participantes de la actividad deportiva, dónde se encontraba el 5 de diciembre del 2021, día el partido, o alguna otra evidencia real -no amañada o preparada en los últimos días- para probar que él realmente no estuvo presente en el evento junto al presidente.

La carta que nos envía el presidente dice que nosotros lo hemos querido vincular a una (cito) “mafia vinculada con empresas chinas que serían indebidamente favorecidas con contrataciones en el Ministerio de Transportes y Comunicaciones”.

Vigilante en ningún momento ha afirmado que el presidente tenga conexión con esta supuesta mafia. El informe tiene como objetivo evidenciar la posible incongruencia del testimonio del empresario Roberto Aguilar Quispe. Son los peritos especializados quienes han concluido que 1) las fotos en las que Aguilar aparecería no fueron manipuladas y 2) que la identidad del empresario coincide con la imagen de la foto.

Los procesos de investigación en curso que enfrentan ambos, Roberto Aguilar y el presidente Castillo, no son materia del informe, ni se hace ninguna afirmación sobre la culpabilidad o inocencia de ambos con respecto a dichos procesos.

Vigilante afirma categóricamente que su informe no quiere desestabilizar al gobierno, tampoco quiere disminuir la confianza del pueblo en el presidente, y menos aún lo difama en ningún momento. El texto del informe escrito, mis declaraciones en el reportaje y, sobretodo, el rol de los especialistas científicos convocados para esta investigación así lo confirman.

Lo que sí podría hacer el presidente o el empresario es hacer pública la lista original y verdadera de ingreso a La Videna, declarar quién fue la persona que aparece en la fotografía mostrando su imagen y su identidad reales y, luego, con un peritaje independiente y especializado, serían capaces de negar las afirmaciones del informe de Vigilante. Este es el camino correcto.

Le pedimos al señor presidente las disculpas del caso si sintió erróneamente algún tipo de imputación o difamación, pero le recordamos que la prensa tiene el deber y el derecho constitucional de evidenciar información a la población y a los distintos organismos estatales que pueda servir para buscar que el sistema de justicia cumpla con su deber. Vigilante ha realizado este informe siguiendo estándares de constitucionalidad, legalidad, seguridad, veracidad y confidencialidad acordes con la mayor ética periodística y sin ninguna intención política, económica o ideológica.