Ministro Zea designa a nueve funcionarios sin perfil y con graves antecedentes

Nueva repartija. Personas sin experiencia ni capacidad de gestión son colocadas en altos cargos del sector Agricultura. A ello se suma la designación de otros personas con denuncias por violencia familiar y uso de arma de fuego.

Siguen las designaciones de funcionarios con antecedentes policiales, graves denuncias y sin el perfil profesional en el gobierno de Pedro Castillo, que es uno de los varios motivos por el que se busca su vacancia. Un modus operandi que se repite en varios ministerios y a los largo de casi estos nuevo meses de gestión presidencial.

Esta vez, el titular del Ministerio de Agricultura y Desarrollo Agrario (Midagri), Óscar Zea Choquechambi, designó a funcionarios con graves acusaciones en su contra y otros sin una trayectoria que los respalde. A ello se suma que el mismo Zea fue acusado hasta por dos homicidios y que incluso estuvo preso en 1999 en el penal de Juliaca, Puno, por el asesinato de Paulino Zeballos Huacas. Y en 2016 fue detenido en Lima en el marco del juicio por la muerte de Edwin Parisuaña Quispe en 2006.

A pesar de las constantes peticiones de la Contraloría y Defensoría del Pueblo, que solicitaron al gobierno a nombrar a personas con un perfil profesión óptimo y sin acusaciones, el también congresista de Perú Libre estaría priorizando la repartija del sector y decidió colocar a Felicísimo Antúnez Antúnez como viceministro de Agricultura Familiar, pese a tener una acusación fiscal por la presunta comisión de los delitos de apropiación ilícita y fraude.

En otros puestos claves también se designó como Director Ejecutivo del Proyecto Especial Sierra Centro Sur a Edgar Sosa Rojas, denunciado por los delitos contra la administración pública en la modalidad de omisión de actos funciones, colusión y negociación incompatible en Ayacucho.

El Secretario General del Midagri, Paul Jaimes Blanco, fue acusado en el 2003 por violencia familiar y fue denunciado por uso de un arma de fuego en 2016.

Por otro lado, hay un funcionario que rotó desde el Despacho Presidencial al Midagri. Se trata de Ysmael Mayuri Quispe, quien está citado en la Comisión de Fiscalización del Congreso luego de conocerse que envió una solicitud a Recursos Humanos con una lista de todo el personal que nació en Chota, Cajamarca, la tierra natal del mandatario.

En el cargo de asesor de alta dirección del Viceministerio de Desarrollo de Agricultura Familiar e Infraestructura Agraria se nombró a Ítalo Díaz Horna, sobre quien es investigado por la Segunda Fiscalía Supraprovincial Corporativa de Lavado de Activos.

El nuevo director general de Políticas Agrarias, Edwin Rigoberto Coico Monroy, no cumple con los requisitos mínimos para ejercer el cargo, según la Contraloría. Durante su paso como Secretario General del Ministerio de Cultura, durante la gestión del exministro Ciro Gálvez, Coico fue señalado como responsable de ocultar resoluciones, retrasar designaciones y favorecer a sus allegados en puestos del sector.

Como jefe del gabinete de asesores del Midagri, el ministro Zea se designó a Javier Bobadilla Lopez, quien fue candidato a gobernador regional de Cajamarca en el 2014, pero no cuenta con estudios superiores.

Por último se colocó a Remigia Montafur Chambilla como responsable titular de brindar la información de acceso público en la Unidad Zonal Puno del Programa de Desarrollo Productivo Agrario Rural y a Luis Sirlopú Saavedra como asesor de Alta Dirección del Despacho Viceministerial. Ninguno contarían con la experiencia necesaria para los cargos.