Tacna y sus desafíos a 96 años de su reincorporación al Perú


En agosto de 1929, Tacna retornó al Perú tras casi 50 años de ocupación extranjera, un hecho que marcó la identidad y el espíritu de lucha de esta región fronteriza. Hoy, a sus 96 años de aniversario, la ciudad muestra fortalezas como punto clave de comercio y de salud, pero también enfrenta desafíos que afectan la calidad de vida de sus habitantes, debido a la ausencia del Estado para garantizar servicios públicos de calidad.
Según el Índice de Competitividad Regional 2025 (INCORE), Tacna destaca en salud, reflejado en su dinamismo comercial en coberturas médicas. Sin embargo, persisten brechas en infraestructura básica, especialmente en el acceso al agua potable, así como limitaciones en conectividad digital en zonas rurales y escolares, lo que dificulta la modernización. La región aún debe avanzar en su inclusión financiera y equidad laboral, con tasas de informalidad laboral alrededor del 70 % y una necesidad de políticas que reduzcan brechas de género.
La eficiencia estatal es otro punto crucial. En Tacna la percepción de inseguridad y victimización ciudadana reduce la confianza en las instituciones. La gestión pública debe mejorar también en la agilización de servicios y transparencia para fortalecer el vínculo entre Estado y sociedad.
El desarrollo económico local enfrenta retos vinculados a la inversión y el comercio fronterizo. El tipo de cambio y la demora en el paso fronterizo con Chile han reducido el gasto turístico y comercial, afectando a uno de los motores económicos de Tacna. Además, el escenario actual impiden que grandes empresas extranjeras inviertan plenamente, limitando la generación de empleo y aportes fiscales.
En términos de inversión pública, ProInversión y autoridades regionales promueven proyectos de infraestructura y servicios a través de asociaciones público-privadas (APP) y Obras por Impuestos (OxI), con una cartera potencial que supera los S/ 1,200 millones. Estos incluyen la masificación de gas natural, mejoramiento del transporte ferroviario y turismo, que podrían impulsar la competitividad y calidad de servicios para 2025.
En este contexto, la vigilancia ciudadana y seguimiento periodístico son cruciales para garantizar que estas inversiones se traduzcan en resultados concretos para la población tacneña. La transparencia en la ejecución y la participación social pueden fortalecer la eficiencia del Estado y la prestación de servicios fundamentales como agua, salud, educación y seguridad.