PetroPerú “no va a poder cumplir con su deuda y va a necesitar un nuevo salvataje”, advierte César Gutiérrez

Un nuevo problema pone en aprietos a PetroPerú tras anunciar que su Unidad de Flexocking (UF), que permite una mayor producción de combustibles de calidad de los residuales de crudo, frenó su funcionamiento por 90 días debido a fallas técnicas, lo que provocó que la Nueva Refinería de Talara (NRT) opere al 76% hasta junio de 2024.

El problema se agrava, pues la petrolera debe pagar una deuda que de US$170 millones en junio, pero según el expresidente del directorio de PetroPerú, César Gutiérrez, es posible que no se cumpla con sus obligaciones y que, incluso, requiera de un nuevo rescate financiero. Además, criticó que correr contra el tiempo para inaugurar la planta de procesamiento trajo consigo una serie de problemas técnicos, y hoy observamos las consecuencias.

¿Es posible reconocer a qué se debe la paralización de la NRT o los responsables de esto?

Encontrar responsables es difícil, porque la UF es una unidad de proceso sin mayor experiencia en Latinoamérica. Es una unidad bastante moderna y por supuesto que en el camino puede haber problemas de funcionamiento óptimo, pero mi impresión es que desde abril de 2022 se trató  de operar la Refinería a pie forzado. Se trató de acelerar, de mostrar resultados, y eso trae su correlato que es lo que estamos viendo. Ojalá puedan poner en servicio en tres meses, porque el impacto económico va a ser muy fuerte en el desmedro de petróleo.

¿Sugiere que esto se origina a raíz de un tema político?

Sí. Con Castillo dijeron “inauguremos ya y mostremos la inauguración como un logro del gobierno de turno”. Ahí hubo la precipitación y comenzaron a mentir (sobre el inicio de su operación al 100%). Andan corriendo contra el tiempo para tratar de satisfacer al presidente de turno y decir “bueno, acá ya se terminó”. Lamentablemente, eso no está sirviendo de nada. En junio se le vencen (a PetroPerú) US$170 millones de pagos entre intereses de bonos, más capital e intereses de una deuda obtenida en Europa.

¿Es posible un nuevo salvataje?

Con lo que viene ocurriendo, de hecho, no van a tener (para pagar su deuda). Ahí está el problema. Ya heredaron el endeudamiento y no han podido cubrirlo. Con el último aporte que le hicieron, con un Decreto de Urgencia, ahora van a tener mayor dificultad, porque la recaudación va a ser menos de la esperada y la probabilidad de  poder cumplir con sus obligaciones financieras se vence en junio. No van a poder cumplir y van a necesitar un nuevo salvataje.

Existe un desbalance de PetroPerú debido a su baja rentabilidad y problemas relacionados con la NRT…

Veo es un desinterés total desde el inicio. He sido crítico al actual (presidente), porque con él se inicia el endeudamiento en el año 2017. Él fue el origen, cumpliendo su rol de gerente financiero, de dar señales de supuestas recuperaciones de las deudas. Las únicas personas que podrían entender la gravedad del tema financiero son la viceministra de Hacienda, Beatriz Otelo, que conoce por dónde van los pies que cojean, que conoce el tamaño de la deuda; y el ministro de economía, José Arista. Pero no los veo dando iniciativas.

¿Expectativas ante el próximo balance del primer trimestre del año?

Veo grave la situación, todo el mundo mira al costado y las cosas ahora se agravaron. Ahora, cuando llegue el primer trimestre, que ya se cerró y se publicará el 30 de abril, los resultados de hecho van a dar negativo. ¿Cuál será el discurso del directorio actual? “Yo heredé eso en febrero. No soy responsable del primer trimestre”. Ese es el discurso que van a escuchar el 30 de abril. El país, por los temas políticos, la distracción, está, por otro lado, pero nadie le está dando la importancia debida y esto le está costando mucho al Estado peruano.