¿Es peligrosa la Nueva Ley de Industrias?: Aquí las razones por las que la iniciativa preocupa
No son una, no son dos, ni son tres. Son varias las preocupantes y peligrosas medidas que se proponen en la iniciativa legislativa «Nueva Ley de lndustrias», presentada por el congresista José Jerí y apoyada por la Sociedad Nacional de Industrias, presidido por Jesús Salazar Nishi. En la iniciativa se beneficia, al principio, ocho sectores, alimentos y agroindustria; pesca y acuicultura; textil y confecciones; industria naval; energías renovables y electromovilidad; proveedores de la minería; TIC y comunicaciones y forestal. Sin embargo, conforme la ley avanza se incluyen otros: Industria del conocimiento y servicios intelectuales, industria construcción y la industria relacionada con los medicamentos y sanidad.
Es esencial generar un impulso económico, más cuando aún nos afecta las situaciones negativas que nos dejó la pandemia, la negligencia del Estado para promover la economía y, ahora, la recesión. Sin embargo, para generar este impulso hay que tener mucho cuidado, pues leyes que se puedan aprobar en el Congreso, como esta, no solucionarán ninguno de los problemas que nos afecta, sino, por el contrario, podría recrudecerla a mediano plazo.
El director de la Asociación de Contribuyentes, José Ignacio Beteta, analizó el proyecto de ley y detalló algunos puntos que generan preocupación y, por lo cual, la iniciativa de Jerí sería es peligrosa. Desde el ángulo económico, por ejemplo, lo que hace el proyecto es promocionar la industria nacional, pero al promover tantos sectores productivos, termina siendo demasiado costosa para el Estado. Es decir, el dinero que dejará de entrar por las exoneraciones que se proponen producirá que la recaudación sea menor. La proyección estimada de pérdida asciende a 15 mil millones de soles por año; 13% de la recaudación de Sunat.
Además, al beneficiar a tantas empresas, lo que generará es que la Sunat no pueda hacer efectiva la supervisión de todos los beneficios que brinda la ley. Así, lo que sí sucederá es que, con la finalidad de poder controlar esta nueva ola de beneficios, la Sunat tendría que ser más rigurosa, más dura, abusiva, grande y costosa. Todo con la finalidad de vigilar esta medida. A ello se suman las exoneraciones tributarias territoriales, dirigidas a la selva y sierra, las cuales, según especialistas, no han tenido un efecto positivo.
Otro punto resaltante es que el documento no calcula el costo económico de la ley. En ese sentido, la principal entidad económica del país, el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF), está en la obligación de solicitar una opinión sobre la iniciativa de Jerí al Consejo Fiscal. Este será un importante punto de partida para analizar el proyecto.
A propósito de este punto, es esencial saber que si se plantean modificaciones tributarias, como es el caso, se necesita un informe vinculante del MEF. Es decir, que antes que el Congreso apruebe o no este proyecto, se debe aprobar el informe. De lo contrario sería ilegal. Por otro lado, el proyecto también tiene observaciones desde el ámbito constitucional, pues viola los artículos 63 y el artículo 79 de la Constitución. El primero señala que las empresas son iguales, ya sea privada o pública; y el segundo, que existen restricciones en el Gasto Público.
Si existen observaciones económicas y constitucionales, naturalmente también las hay desde el análisis político. Es decir, un gremio no puede ir al Congreso a sacar una ley, porque eso es, en materia económica, responsabilidad del MEF o del Ejecutivo. Entonces, lo que está haciendo una parte del empresario es saltarse al gobierno y a las entidades técnicas para ir al Congreso y pedir que se apoye un proyecto de ley peligroso. En esa línea, los canales adecuados son también el Consejo Nacional de Competitividad, la Presidencia del Consejo de Ministros, la Sunat y otras entidades.
Teniendo en cuenta esta preocupante situación, es vital abrir un camino de diálogo pues, además, existe la oportunidad para hacer reformas que sostengan la economía, a las industrias y los contribuyentes a lo largo del tiempo.