“No es falta de recursos para comprar urea; no saben hacer los procesos”, dice la FAO
El economista jefe y subdirector general del Departamento de Desarrollo Económico y Social de la FAO, Máximo Torero, brindó una entrevista sobre la situación crítica del Perú ante la inseguridad alimentaria y cuestionó la falta de capacidad de los funcionarios para adquirir fertilizantes.
La reciente información sobre los contundentes cambios en la cuarta compra de fertilizantes, que indican de un probable fracaso en la adquisición, recuerda que el Perú está ante un frágil y preocupante escenario respecto a su seguridad alimentaria, que también es consecuencia de políticas económicas que no fueron aplicadas de manera correcta en el gobierno de Pedro Castillo.
Según el informe “Estado de la inseguridad alimentaria y la nutrición en el mundo”, publicado en agosto de 2022, el Perú tiene 16.6 millones de peruanos en inseguridad alimentaria, lo que evidencia “un aumento vertiginoso nunca antes observado en el país”.
Por ello, la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO, por sus siglas en inglés) expresó “su profunda preocupación por la situación y llamó a la acción urgente y sostenida del Gobierno, la sociedad civil, el sector privado, los medios de comunicación, la academia y la cooperación internacional para frenar y revertir la altísima vulnerabilidad que enfrenta el país”.
El economista jefe y subdirector general del Departamento de Desarrollo Económico y Social de la FAO, Máximo Torero, brindó una entrevista a Bloomberg Línea donde analizó el contexto que el Perú afrontó tras el primer año de pandemia y que afronta de cara al futuro. Por otro lado, cuestionó la falta de capacidad de los funcionarios para adquirir fertilizantes, puesto que podría tener consecuencias negativas para los peruanos.
Torero remarcó que en el país se duplicó la pobreza extrema y en paralelo existe “una inflación alta, los precios de los alimentos suben fuertemente”. “Esa situación nos ha llevado a salir alertando sobre este problema, porque Perú es un país donde esto no debió haber pasado (…) En toda crisis hay una oportunidad y a Perú se le fueron las dos cosas: las oportunidades y un buen manejo de la crisis. Las consecuencias de eso nos preocupa muchísimo”, agregó.
El economista también cuestionó la demora del gobierno para la adquisición de fertilizantes. “Veamos los hechos: si comparo a Perú con lo que ha pasado en Ecuador, veo que Ecuador logró hacer la importación de fertilizantes en diciembre del 2021. ¿Por qué Perú no lo hizo? Si comparo Perú con Brasil, Brasil logró hacer un intercambio de fertilizantes por soja y pudo conseguirlos. Colombia logró comprar fertilizantes y tuvo buena cobertura. Bolivia tiene sus propios fertilizantes y Perú antes importaba de Bolivia, pero ahora no lo logró. ¿Por qué no aprovechar la amistad de los presidentes (entre Pedro Castillo y Luis Arce) y conseguir fertilizantes bolivianos? Esto demuestra que algo está mal. Están poniendo en riesgo algo que es muy sensible socialmente, y de forma innecesaria. No es que no hayan los recursos financieros para comprar fertilizantes en Perú, es que no saben hacer los procesos”, explicó.
En esa línea, asumió que esta situación se debería a un problema de gestión, porque “hay procedimientos que se tienen que seguir en las licitaciones y las sanciones no son una excusa, porque se le pudo comprar directamente a Rusia”. “Hay posibilidades de compra y no se entiende que aún no se pueda lograr”, acotó.
Sin embargo, Torero recordó que “la seguridad alimentaria estuvo en riesgo a lo largo del año por precios altos y problemas de acceso a alimentos, lo que estaba afectando a los más vulnerables”. A ello se sumó la incapacidades del país para la compra de fertilizantes, lo que agrava más la problemática.
“Ahora el problema más serio para un país exportador y productor de alimentos como Perú son los fertilizantes. El precio del gas en el mundo sigue subiendo, el precio del nitrógeno sigue subiendo y eso va a llevar a que el precio del fertilizante siga subiendo, volviendo los costos de producción más altos. Si los costos de producción son más altos y no tienes acceso a fertilizantes, países como Perú deberían ya haber solucionado ese problema; pero por problemas operativos e incapacidades Perú no lo ha hecho. No se han hecho licitaciones de forma adecuada ni se han utilizado las herramientas a las que el país puede acceder”, sostuvo.
En esa línea, Torero exhortó a gestionar la comprar los fertilizantes “la compra de una vez”, a pesar que la campaña agrícola ya está en curso. “Las grandes (empresas de agricultura) van a comprar fertilizantes a un mayor precio, tendrán menos ganancias pero lo van a concretar. Están buscando alternativas y también tienen su propio mecanismo de importación. Los pequeños agricultores comerciales que normalmente compran abonos en menores cantidades, acceden a subsidios del Estado, entre otros, son los más afectados. Aunque van a poder usar alternativas, tendrán una menor productividad y por ende menores ingresos, o se van a endeudar para comprar fertilizantes a un costo elevado. Ello sí puede generar problemas importantes en términos del acceso a alimentos a nivel nacional y generar vulnerabilidad para los productores chicos”, explicó.
En tanto, cuestionó la estrategia del uso del guano de las islas como fertilizantes, debido a que “la agricultura comercial necesita NPK (fertilizantes formados por nitrógeno, potasio y fósforo)”.
El economista consideró que el gobierno debe “acelerar un proceso para rehacer listados de quiénes son los más vulnerables en este momento” tomando en cuenta la nueva información de Food Insecurity Experience Scale. Además, que se focalice y mejore los programas sociales existentes y no impulsar “cualquier política como la que aprobó el Congreso de bajar el IGV a alimentos no va, porque se quiere focalizar a los más vulnerables. Lo del IGV beneficia a todos y no se quiere eso, Perú ya no es el país millonario que podía distribuir lo que quería”.
Finalmente, exhortó a “reforzar las capacidades técnicas” de los Ministerios y “no perderlas” para que así “operen para que se puedan hacer las cosas correctamente”.