Ipsos: El 52% de peruanos siente que precios de alimentos subieron más en bodegas
Estudio «El consumidor peruano en inflación» recoge la percepción de los ciudadanos sobre el encarecimiento del costo de vida en el Perú en un contexto de inestabilidad política e incertidumbre económica.
A la fecha, el salario promedio en el Perú es de S/.1,525, según datos oficiales del DNI, monto que los trabajadores distinan para su alimentación, educación, vestimenta e, incluso, actividades recreacionales. Sin embargo, la inflación ha provocado que ese dinero se vuelva insuficiente, sobre todo, para cubrir el costo de una dieta balanceada de los miembros de una familia.
Si bien el incremento de la tasa de inflación en el Perú y la devaluación de nuestra moneda se debe a múltiples motivos, la responsabilidad casi absoluta recae sobre los hombros del presidente Pedro Castillo, quien con una denuncia constitucional en su contra por presuntamente verse involucrado en actos de corrupción ha dejado de gobernar al país para continuar victimizandose ante la opinión pública.
El populismo y la falta de iniciativas que verdaderamente beneficien al pueblo peruano, ese que Castillo Terrones y su entorno dicen representar, ha demostrado cómo este gobierno, en lugar de generar y promover el crecimiento de nuestra economía, ha provocado que los peruanos reduzcan sus raciones de alimentos y eviten comprar ciertos productos de la canasta básica familiar, por su alto costo.
De acuerdo a un estudio de Ipsos, denominado «El consumidor peruano en inflación», el 52% de peruanos advierte que el alza de precios se siente con mayor fuerza en las bodegas, mientras que el 28% asegura que el incremento del valor de los alimentos varía más en supermercados.
Para Javier Álvarez, director senior de Tendencias de Ipsos, el alto valor de las verduras, tubérculos, vegetales y el pollo en las bodegas se debe a que los comerciantes de los centros de abastos menores no siempre negocian con el propio fabricante, lo cual no les permite obtener el precio más bajo.
Por otro lado, el 15% de los connacionales aseguran que el alza de precios recayó sobre los restaurantes, mientras que el 14% en las farmacias.