Pedro Castillo brinda conferencia de prensa y no invita a medios nacionales
El presidente de la República y miembros del Consejo de Ministros brindaron una conferencia para medios extranjeros y excluyeron a la prensa nacional sin justificación alguna
El último martes 11 de octubre, la fiscal de la Nación, Patricia Benavides, presentó una denuncia constitucional contra el presidente de la República, Pedro Castillo, por presuntamente ser el líder una organización criminal enquistada en el gobierno.
Tras el terremoto político, el mandatario y los miembros de su Consejo de Ministros decidieron convocar una conferencia de prensa en Palacio de Gobierno, a la cual no invitaron a los medios nacionales.
La sorpresa para los periodistas peruanos no fue nada grata debido a que se trataba de una conferencia de gran envergadura. Además, dentro del recinto en donde Castillo Terrones y sus ministros debían responder las interrogantes de los hombres de prensa solo estuvieron presenten los representantes de medios internacionales. Hecho que resultó curioso e, incluso, preocupante.
Sobre ello, la excusa que ofrecieron ministros como Alejandro Salas, titular de la cartera de Trabajo y Promoción del Empleo, se basó en que los diarios y cadenas internacionales habían solicitado exclusividad para cubrir el evento.
Sin embargo, esta afirmación fue desmentida por la Asociación de Prensa Extranjera en Perú (APEP), quienes se pronunciaron a través de un comunicado que indicaba que la información no era verdadera y que, por el contrario, fueron los voceros del Ejecutivo los encargados de convocar a todos los medios.
Entonces, ¿por qué Pedro Castillo decidió impedir el ingreso de los medios peruanos al recinto?
Este comportamiento poco transparente es común en el primer mandatario, quien prefiere callar y ocultarse tras las rejas de Palacio de Gobierno en lugar de responder las preguntas de los periodistas que cuestionan su pésima actuación como presidente.
Si bien su periodo de gestión aún es corto, no caben dudas de que el jefe de Estado repele a la prensa peruana y, no contento con no brindarle declaraciones, decide humillarlos y prohibirles el paso a la libertad de expresión e información.
Si bien la conferencia del día anterior le sirvió a Pedro Castillo para repetir el mismo discurso de victimización y para asegurar que no se retiraría de la presidencia antes de 2026, también fue útil para evidenciar cómo el presidente del “pueblo” prefiere mantenerse lejos de los medios nacionales sin brindarles información certera y verdadera sobre las acusaciones que pesan en su contra.