Implicancias y consecuencias del destape sobre la “pichanga de los millones”
Imágenes que reveló Vigilante.pe evidencian lo que el presidente Castillo y el proveedor del Estado Roberto Aguilar Quispe habían negado. Para la penalista Romy Chang, tanto el mandatario como el joven empresario mintieron porque buscarían “ocultar la verdad sobre la organización criminal” en el MTC. La congresista Susel Paredes sostuvo que la situación abre un nuevo camino a la vacancia.
“No conozco a ninguna persona (vinculada a Karelim) López. No soy de su círculo social. Nunca he tenido contacto con ningún político. No conozco a Pedro Castillo ni a sus allegados”, afirmó el joven empresario Roberto Aguilar Quispe (27), al intentar marcar distancia de las declaraciones de la lobista investigada y aspirante a la colaboración eficaz, que declaró ante la Fiscalía de Lavado de Activos que este ingeniero apenas graduado en 2021 está implicado en una supuesta mafia, liderada por el presidente Pedro Castillo y el exministro Juan Silva, en el Ministerio de Transporte y Comunicaciones (MTC), para direccionar obras públicas a empresas chinas.
Según información pública, Aguilar Quispe logró que sus asociadas, las empresas China CAMC Engineering CO. LTD y China Civil Engineering Construction Corporation, contraten con el Estado por más de S/580 millones. Todo en menos de 10 meses de gestión del presidente Castillo y en medio de una serie de irregularidades que, hasta ahora, no ha sabido responder con claridad; por el contrario, buscó negar cualquier vínculo con otros investigados.
Pero una imagen vale más que mil palabras. Vigilante.pe difundió fotografías, sometidas a dos peritajes independientes, en las que se ve que Aguilar Quispe jugó con el presidente Castillo, en diciembre de 2021, una “pichanga” en la Videna, donde estuvieron presentes personal del despacho presidencial y los hoy prófugos sobrinos de Castillo, Fray Vásquez y Gian Marco Castillo. ¿Por qué Aguilar negó su vínculo con el presidente?¿Qué intentó ocultar?
La abogada penalista Romy Chang sostuvo que las imágenes reveladas por Vigilante.pe complicarían mucho la situación de Aguilar pues “se estaría corroborando de alguna manera la hipótesis de la Fiscalía de que hay una organización criminal donde las personas implicadas tienen roles repartidos y habrían operado de manera sistemática para repartirse obras publicas en agravio del Estado para beneficiar a ciertas empresas establecidas”.
“Según Karelim (López), (Roberto) Aguilar habría tenido el rol de testaferro, pero además cumpliría un rol especial pues da la cara para ocultar el rostro de quiénes están detrás y son parte de la red. Entre ellos se encontraría el presidente Castillo y sus sobrinos que continúan prófugos. Eso se condicionaría mucho con la fotografía jugando fútbol pues el entorno de estos encuentros son entre personas que conoces o amistades de confianza. Más aún siendo el presidente. Si él (Aguilar Quispe) estuvo ahí es porque era de confianza. Es una prueba más de que ni el presidente ni Aguilar dicen la verdad y que buscarían ocultar su participación en la supuesta organización criminal”, explicó a esta plataforma informativa.
En tanto, para la congresista Susel Paredes esta situación podría reabrir la puerta de la vacancia presidencial, debido a que sería una prueba más de la corrupción enquistada en la gestión de Castillo y en el MTC. “¡Pichanga presidencial! que jueguen fútbol el proveedor del Estado Roberto Aguilar y el presidente Castillo, comprometería seriamente a este último con el direccionamiento de obras a empresas chinas. Si el peritaje oficial confirma que es el proveedor, se reabriría la puerta de la vacancia”, tuiteó.
Desde la Comisión de Fiscalización del Congreso señalaron que Aguilar Quispe habría mentido a a este grupo de trabajo sobre si tenía algún vínculo con personajes allegados al gobierno, empezando por el presidente Castillo. “Esta semana evaluaremos variar su condición a investigado”, adelantaron.