Distorsionando la realidad: CENSO 2025 en peligro por presunta injerencia de activistas radicales
Perú21 denunció en su último informe que el CENSO 2025 podría estar en grave peligro por la posible variación de la ficha técnica. El Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI) pretende modificar las opciones de respuesta a la pregunta de autoidentificación al relegar las categorías “blanco” y “metizo” al apartado de “otros”, incluso, cuando en 2017 el 66% de la población marcó estas alternativas. En su lugar, se dará prioridad en el encabezado a las etnias indígenas y pueblos originarios.
Si bien los especialistas coinciden en que el problema no surge al permitir que las personas pertenecientes a comunidades indígenas u originarias tengan una opción para autodenominarse durante el proceso, sí consideran que restarle visibilidad a las categorías “blanco” y “mestizo” estaría direccionado la encuesta a cumplir una agenda política.
De acuerdo con el referido medio, activistas de la Organización Nacional de Mujeres Indígenas Andinas y Amazónica del Perú (ONAMIAP) y la Confederación de Nacionalidades Amazónicas del Perú estarían directamente involucrados en el hecho, debido a que existen registros de reuniones con altos funcionarios del INEI para abordar estos temas.
Asimismo, durante el último año se organizó el foro denominado “Politizando la autoidentificación colectiva. Visiones y perspectivas hacia la descolonización”, en el cual se presentó la periodista y activista de derechos humanos, Sofía Carrillo, quien mencionó que “a blancos y mestizos en esta ocasión les corresponde colocarse al lado”.
A raíz de estas declaraciones y la presunta intervención arbitraria en la ficha técnica del CENSO 2025 por parte del INEI surgen la siguiente interrogante: ¿existe un real interés por visibilizar a las comunidades indígenas u originarias o lo que buscan estas ONG es replicar una narrativa de división para saciar intereses políticos particulares?
El fundador e investigador del Centro Wiñaq, Camilo Ferreira, advirtió que las ONG con “agendas indigenistas” tienen como finalidad ganar relevancia para estos grupos étnicos a fin de acceder a más recursos públicos. Es decir, pretenden crear un problema a través de un discurso divisionista. “El objetivo es político”, sentenció.