EsSalud requiere atención urgente
Son millones los afectados por la poca capacidad de atención que tiene EsSalud, pero la nueva gestión y el directorio quieren cambiar las cosas. El problema es complejo: la proyección de ingresos y gastos para el período 2022-2032 revela un cambio de superávit a déficit anual a partir de 2023, justificado por el aumento en prestaciones médicas y económicas, la disminución de otros ingresos y el crecimiento del gasto en infraestructuras.
¿Cómo solucionar este problema? El Seguro Social de Salud (EsSalud) tiene, según sus propios registros, 12,739,461 de asegurados. A pesar de los millones de personas que están aseguradas en EsSalud, según un informe del Instituto Peruano de Economía, en los últimos 15 años, la recaudación real y el número de afiliados prácticamente se duplicó, pero el número de consultas apenas creció 5%.
Esto refleja la preocupante situación que atraviesa la entidad, que lamentablemente ha tenido solo cuatro años a 8 presidentes ejecutivos. Así, lo primero que se requiere es estabilidad. No se puede cambiar a sus líderes según el vaivén político de turno. Con la estabilidad lo que se requiere es una reforma interna para mejorar su eficiencia. Por ejemplo, al día de hoy, EsSalud cuenta con más de 100 sindicatos de trabajadores activos que reclaman diversas consideraciones y dádivas, pero que NO necesariamente le generan valor a la entidad; no pueden ser recolocados según la demanda de los establecimientos, sus horarios no son fiscalizados de manera efectiva, y muchos trabajadores nombrados no cumplen con sus labores, al tener un contrato asegurado casi de por vida.
En este contexto cabe recordar la Organización Internacional del Trabajo (OIT) y EsSalud presentaron los resultados del Estudio Financiero Actuarial 2021, actualizado al 2022 y 2023, y alertó sobre la ampliación de la cobertura que de todas formas se avecina.
En tanto, un análisis que realizó la Asociación de Contribuyentes del Perú expuso que Essalud enfrenta una crisis financiera también por gastos en inversión de infraestructura. Estos incluyen inversiones planeadas para los hospitales de Piura y de Chimbote a partir de 2026; proyectos como Hospital III Callao, Hospital III VMT y el Proyecto Trecca que ya comenzaron en 2023; y contratos de Asociación Público-Privada (APP) para almacenes y farmacias iniciados en 2022.
¿Significa esta situación que debemos volver a retener de las gratificaciones o liquidaciones de los trabajadores el 9% para dárselo a EsSalud? No, de ninguna manera. En situación de crisis, recesión económica y parálisis de inversiones, ni el empleador ni el empleado pueden ser afectados por la situación de una entidad estatal que requiere reformas internas laborales, financieras y de política pública. Primero ajustamos el cinturón, usamos bien los recursos, organizamos el personal y el capital humano pensando en el paciente y no en los sindicatos, y luego, mucho después, pensamos en los mecanismos de recaudación hacia los contribuyentes.
DATOS CLAVE
- En 2022, un asegurado esperó 8.4 días en promedio para ser atendido en un hospital de Essalud (Esto es el doble que en un hospital del Ministerio de Salud o en un consultorio particular)
- La proporción de sus asegurados que ante una enfermedad o malestar visitan un hospital de Essalud se redujo de 45%, en el 2004, a 31% en el 2022
- El porcentaje de personas que van a una clínica o consultorio privado para su atención médica pasó de 10% a 17%.
- El porcentaje de pacientes que adquieren sus medicinas en farmacias y boticas privadas pasó de 5% a 15%.
- Los pacientes que aportan a EsSalud, pero cuentan con una póliza privada, no se pueden atender en los establecimientos de esta entidad según la patología que enfrentan.
**Informe realizado por la Asociación de Contribuyentes del Perú y publicado en Perú21.