Gobiernos subnacionales no ejecutaron el 29% del presupuesto destinado a prevención de desastres naturales
Las fuertes precipitaciones en la zona centro y sur del país están causando fuertes estragos en diversas comunidades como el desprendimiento de rocas en medio de las vías e, incluso, intensos huaicos que se cobran la vida de decenas de peruanos. Arequipa fue el escenario del último desastre natural registrado en el país, en el cual murieron 18 personas luego de que una avalancha de lodo cubriera casi por completo el distrito de Mariano Nicolas Valcarcel.
En aquella oportunidad, se reportaron 20 heridos y decenas de familias afectadas por el derrumbe de 496 viviendas y edificaciones. Lamentablemente, sucesos como estos ocurren con periodicidad en el país, sin embargo, nuestras autoridades no hacen mucho por prevenir muertes y millones de soles en pérdidas económicas.
De acuerdo a lo informado por el Centro Nacional de Estimación, Prevención y Gestión de Riesgo de Desastres (Cenepred), aproximadamente 3.8 millones de peruanos de 20 regiones se encuentran en riesgo “alto” o “muy alto” de ser víctimas mortales de un desastre natural de diversa índole. Esto revela que un alto porcentaje de la población se encuentra asentada en zonas vulnerables como las riberas de los ríos o en medio de quebradas inactivas, hecho que debería ser corregido por nuestras autoridades con apoyo del presupuesto brindando a reducir y/o mitigar el riesgo de desastres
Para desdicha de todos los peruanos, el gobierno central y los gobiernos subnacionales no han ejecutado adecuadamente el dinero asignado por el Estado. Durante los últimos 5 años, el monto destinado a prevenir desastres fue de S/.6,912 millones, sin embargo, solo se ejecutó el 51%, según Gestión. Si observamos las cifras con detenimiento, podemos afirmar que el gobierno central dejó de ejecutar el 56% del dinero transferido, mientras que los gobiernos regionales no hicieron uso del 49%. En el caso de los gobiernos municipales, estos retornaron hasta el 42% del dinero asignado durante el último quinquenio.
En 2022, los gobiernos subnacionales invirtieron un total de S/.909,7 millones del presupuesto transferido, no obstante, dejaron de ejecutar un saldo de 29%; es decir, S/.371 millones. Si bien el gobierno central logró invertir el 90% del dinero asignado para prevenir el riesgo de desastres, al finalizar el año se retornaron S/. 85 millones.
Como si fuera poco, regiones como Piura, Ancash o Ica (departamentos duramente golpeados por la furia de la naturaleza) son las menos atendidas por el Estado. Lo mismo ocurre en los distritos capitalinos de San Juan de Lurigancho, Villa Maria del Triunfo, Comas o Carabayllo, en donde se invierte menos de S/.1 per cápita.
De acuerdo a lo señalado por la especialista en gestión de riesgo de desastres, Mary Mollo, para El Comercio, el Estado debe ser el pionero en promover proyectos y políticas públicas que eviten que más peruanos pierdan la vida ante una eventual catástrofe natural. Asimismo, afirmó que no solo se necesitan descolmatar ríos o quebradas para evitar inundaciones o huaicos, sino que también es necesario reubicar a las ciudadanía en caso se identifique que se encuentran en grave peligro.