Ley que regula fondos de ONG sigue sin reglamento a la vista


El 15 de abril se promulgó la ley que modifica la Ley de Creación de la APCI, con el objetivo de transparentar los fondos que reciben las ONG de contribuyentes del extranjero. La norma obliga a registrar proyectos, detallar planes anuales y rendir cuentas sobre las actividades financiadas por cooperación internacional.
Aunque el Congreso ya dio luz verde, aún falta el reglamento que detalle cómo se implementará. ¿Qué sanciones se aplicarán? ¿Qué criterios se usarán para la fiscalización?
Mientras gremios y organizaciones como la Coordinadora Nacional de Derechos Humanos advierten que podría usarse para restringir libertades, otros sectores recuerdan que durante años estos fondos se movieron con escasa fiscalización y sin pruebas claras de su impacto real.
La ley no prohíbe que las ONG reciban fondos del extranjero, simplemente exige que informen cómo los usan. En esencia, se trata de una medida de rendición de cuentas que, aplicada con criterio técnico, no debería incomodar a ninguna institución que maneje recursos públicos.
El riesgo está en que, sin un reglamento claro y técnico, la ley se convierta en una herramienta de presión política más que en un mecanismo de transparencia. La cooperación internacional es vital para el desarrollo, pero su buen uso también depende de reglas justas y aplicadas con neutralidad.