Aulas en peligro: escuelas sin servicios básicos y con infraestructura en ruinas


El sistema educativo peruano enfrenta serias deficiencias en infraestructura, acceso a servicios básicos y financiamiento adecuado, lo que limita la calidad del aprendizaje y pone en riesgo la seguridad de los estudiantes. Con una brecha de inversión en infraestructura de S/ 158,832 millones y el 16.2% de colegios públicos en riesgo de colapso, es evidente que la educación no parece ser una prioridad para el Estado.
El acceso a servicios básicos en las escuelas públicas sigue siendo alarmantemente bajo, con menos del 30% de colegios contando con agua, saneamiento y electricidad al mismo tiempo, según cifras del Ministerio de Educación (Minedu). Este resultado superó ligeramente a las cifras reportadas en 2022 (29.2%), sin embargo, se mantiene lejos del máximo histórico obtenido en 2016 (44.4%). De acuerdo con la economista y directora de la Asociación de Contribuyentes del Perú, Camila Costa, “todas las escuelas del Perú deberían contar con agua, luz e internet. No debería aspirar a los máximos históricos; sino al 100%”.
Solo el 34.9% de escuelas públicas a nivel nacional estuvieron conectadas a la red nacional pública de agua en 2023, según el Minedu. Los departamentos con menor acceso al agua potable son: Loreto (12.1%), Ucayali (12.7%) y Amazonas (15%). Respecto al acceso a servicios de saneamiento, solo el 48.3% de escuelas a nivel nacional cuenta con este privilegio. Las regiones con menos colegios con acceso a este servicio son Loreto (29.8%), Ucayali (33.8%) y Pasco (35%).
Este retroceso de más de 15 años en la cobertura básica refleja una falta de planificación y una mala distribución de recursos, lo que impacta directamente en la calidad educativa y la permanencia de los alumnos en el sistema. ¿Qué hará el Estado para revertir esta situación?
