Fecha: 19 febrero, 2025 Tipo de cambio : s/ 3.683

Burocracia, falta de financiamiento y limitada planificación: el camino forzado hacia la vivienda formal

En Perú, la excesiva regulación, el difícil acceso al crédito y la falta de planificación urbana convirtieron la autoconstrucción en la única opción para miles de familias. Mientras la vivienda formal sigue siendo inaccesible para los sectores de menores ingresos, la informalidad se expande con el aval del Estado.
Gabriela Llontop Publicado 9:32 am, 12 febrero, 2025

La informalidad en el sector vivienda es uno de los problemas más críticos y persistentes en el Perú. Se estima que más del 90% de la expansión urbana en el país ocurre de manera informal, y el 73% de las viviendas son producto de la autoconstrucción. Esto ha generado ciudades con infraestructura precaria, viviendas vulnerables a desastres naturales y servicios públicos insuficientes. Además, la burocracia excesiva y los altos costos de formalización incentivaron esta situación, haciendo que la mayoría de los ciudadanos busque soluciones fuera del marco legal.

La Asociación de Contribuyentes del Perú (ACP) emitió un análisis respecto a los factores que impiden la formalización en el sector, entre las principales causas resaltan la excesiva regulación, falta de financiamiento, tráfico de terrenos, limitada planificación urbana y un mercado de vivienda formal poco asequible.

  • Exceso de burocracia y regulaciones complejas

El proceso para obtener permisos de construcción en Perú es largo y costoso, lo que desalienta la formalización y promueve la autoconstrucción en terrenos sin servicios básicos. La demora en la aprobación de licencias lleva a muchas familias a edificar de manera informal, agravando el problema de acceso a vivienda adecuada.

  • Falta de acceso a créditos y financiamiento

Los requisitos para acceder a créditos hipotecarios excluyen a gran parte de la población con ingresos informales o bajos. Los programas de vivienda social tienen criterios restrictivos que dejan sin opciones a muchas familias, quienes terminan construyendo por su cuenta, sin asesoría técnica y en condiciones precarias.

  • El Estado incentiva la producción de vivienda informal

Mientras que la vivienda formal está sujeta a regulaciones costosas y complejas, la urbanización informal es tolerada e incluso incentivada. La expectativa de que el Estado provea servicios básicos a asentamientos informales sin costo fomenta la ocupación ilegal de terrenos y la especulación inmobiliaria.

  • Tráfico de terrenos y ocupaciones ilegales

El crecimiento desordenado de las ciudades ha permitido la proliferación del tráfico de terrenos, donde mafias venden lotes sin títulos ni servicios. Muchas familias vulnerables ocupan estos terrenos con la esperanza de regularizarlos en el futuro, agravando la expansión informal.

  • Falta de planificación urbana

La expansión de las ciudades peruanas ha ocurrido sin una estrategia integral, lo que ha generado asentamientos informales en zonas de alto riesgo. La ausencia de un rol activo del Estado en la planificación urbana ha dejado el crecimiento de las ciudades en manos de la informalidad.

  • El mercado de vivienda formal no se masifica

El acceso a vivienda formal está limitado a los sectores de mayores ingresos, mientras que los programas de financiamiento para sectores medios y bajos resultan insuficientes o poco accesibles. Como consecuencia, la autoconstrucción y la informalidad siguen siendo la principal alternativa para la mayoría de los hogares de bajos ingresos.

Gabriela Llontop Periodista y redactora

COMPARTIR NOTICIA