Preparan ordenanza que afectaría restaurantes y empresas de “delivery”
EL “EJEMPLO” DE MIRAFLORES
Hace unas semanas la Municipalidad de Miraflores promulgó una ordenanza que dispone, de manera declarativa, el empadronamiento de motorizados en un aplicativo creado por el municipio, y en el cual se le otorgará a cada repartidor un código QR para que pueda ser identificados en los operativos de fiscalización que se realicen.
“Al ser una ordenanza que invita a este registro de forma declarativa, está perfecto, pero no es garantía de que vayas a solucionar algo. Lo que quieres combatir es la inseguridad ciudadana y no se soluciona con eso. Además, cuando llegue el momento de la fiscalización va a provocar una ola de problemas de tránsito (…) También se abre una ventana a la corrupción”, explicó una fuente vinculada al sector que prefirió mantener el anonimato.
La misma fuente saludó que la gestión de Miraflores tuviera “mucha apertura” para escuchar las posturas de las partes y añadió que “a la luz de lo que están queriendo regular en otros distritos, este es el mejor el camino (…), el menos doloroso para los restaurantes y menos doloroso para el repartidor”.
Por su parte, el gerente legal de Comex, Jaime Dupuy, saludó el interés y la apertura al diálogo de la gestión del alcalde Carlos Canales, pues “es un ejercicio interesante, con un mensaje bien político, porque además hay preocupación de los vecinos por la seguridad y orden (…). Hay herramientas (algoritmos) que las mismas plataformas pueden brindar para tratar de solucionar esta problemática”, añadió.
SAN ISIDRO SERÍA MÁS DURO
La Municipalidad de San Isidro, encabezada por Nancy Vizurraga, prepara una ordenanza similar, pero agregando una disposición que sancionaría a las empresas repartidoras y a los restaurantes que usen sus servicios. “Para la Municipalidad de San Isidro el negocio del delivery recae tanto en la plataforma de reparto como en el restaurante. Entonces tienen la expectativa de condicionar las licencias de funcionamiento y la renovación de la inspección técnica de seguridad en edificaciones (ITSE) para incrementarles obligatoriedades como estacionamientos para motos”, advirtió la fuente.
De concretarse la ordenanza, cada restaurante, dependiendo de su tamaño, tendría la obligación de tener dos estacionamientos para autos y dos espacios exclusivos para motos de delivery. Si no cumplen con esta obligación, el restaurante podría ser sancionado. Los potenciales afectados señalaron que en el distrito hay un problema evidente de falta de estacionamientos. Entonces, un pedido de esa magnitud generará que varios restaurantes o empresas no puedan operar, o tengan que pagar un alto costo para implementar una infraestructura tan particular. “Van a generar unas obligatoriedades a los restaurantes que muchos de ellos no pueden asumir”, señaló la fuente.
Esta medida, a todas luces, sería una práctica abusiva de la municipalidad san isidrina, más aún cuando no hay disposición de sus autoridades para brindar otras alternativas de solución al problema.
Todo apunta a que la solución pasa por el trabajo articulado entre municipalidades y empresas, con la finalidad de no afectar el trabajo de miles de personas y garantizar a la vez la seguridad ciudadana. Para proteger la paz de los ciudadanos no se puede limitar la libertad de emprendimiento de otros ciudadanos. Las autoridades tienen la responsabilidad de cumplir con su labor, garantizando la seguridad de las personas para que puedan libremente realizar sus actividades económicas y sociales.