Conflictos sociales y la reprogramación de créditos: entidades financieras aún registran un alto número de deudores
La vacancia de Pedro Castillo no solo afectó seriamente en la política peruana, sino que también generó una ola de violentas protestas que atentaron contra la vida de miles de personas y la economía nacional. Como muchas pequeñas y medianas empresas se vieron en la obligación de cerrar sus puertas para no sufrir las consecuencias de los disturbios en las calles, sus niveles de ventas y productividad descendieron rápidamente durante el primer trimestre del año.
El Ejecutivo, con la intención de ayudar a los emprendedores, permitió la reprogramación de deudas financieras. No obstante, el pago de estos préstamos no se lleva a cabo como lo esperado debido a que, solo hasta marzo de 2023, se reportó un saldo pendiente de pago de S/11,734 millones, según información del Banco Central de Reserva del Perú (BCRP).
Durante 2023, se ha observado un incremento de morosidad, pues los fenómenos climáticos como el paso del ciclón Yaku y el anuncio del Fenómeno El Niño también generaron preocupación en aquellos ciudadanos con deudas pendientes en las entidades bancarias. Si bien esta facilidad permite que los peruanos con préstamos activos puedan pagar los saldos pendientes sin afectar su economía familiar, es preciso mencionar que no cumplir con los tiempos de reprogramación no es benéfico para el país.
De acuerdo a lo mencionado por Michaela Casassa, directora financiera de Interbank, “el comportamiento de pago de los clientes está siendo peor de lo esperado”, lo cual afecta en un contexto de menor crecimiento de la economía peruana.
Cabe precisar que los fondos reprogramados por conflictos sociales corresponden a S/ S/2,675 millones, mientras que los montos aplazados por el Fenómeno El Niño o Ciclón Yaku representan un total de S/320 millones.
Hasta el momento, se desconoce cuando los ciudadanos con deudas pendientes podrán pagar la totalidad del crédito requerido, es necesario mencionar que la baja rentabilidad de las mypes es un factor crucial que impide la solvencia económica de estos pequeños empresarios. Campañas como el día de la madre, inicio del año escolar o fiestas patrias se vieron duramente afectadas por las continuas marchas en contra del gobierno de turno.