¿Cómo va la ejecución en Puno?: región registra 45% de avance de todo su presupuesto
El Ejecutivo designó al Gobierno Regional de Puno S/ 2,892,206,054 para el 2023. Sin embargo, al 18 de julio solo se ha ejecutado el 44.7%. El presupuesto total se divide de la siguiente manera: 54% en planillas, 25% en inversiones (adquisiciones de activos no financieros), 13% en bienes y servicios (incluye CAS, consultorías, terceros, etc.), y 5% otros gastos. Sin embargo, la ejecución en inversiones (construcción de colegios, hospitales, caminos, etc.) es apenas 24.5%.
Según el análisis realizado por la Asociación de Contribuyentes del Perú, de los 10 proyectos con mayor presupuesto asignado, la mayoría pertenecen al sector Transporte. Dentro del listado, el proyecto “Fortalecimiento de la capacidad resolutiva del Hospital Regional Manuel Núñez Butron”, el cual, durante el 2023, tiene 0% de avance y no registra ningún desembolso. Según la información a la que se accedió, en el 2018 se avanzó con la elaboración del expediente técnico, instalaciones médicas (S/ 116 millones), y otros gastos diversos de activos no financieros (S/ 5 millones). A pesar de estos desembolsos, no hay nada avanzado.
Según el GORE Puno, dicho hospital es el más representativo de la región, pero ante el nulo avance se solicitó la asistencia técnica de PRONIS y se firmó un convenio específico para la participación de Centro de Investigaciones Sísmicas y Mitigación de Desastres (CISMID) de la Universidad Nacional de Ingeniería.
MÁS DATA
Siguiendo el desglose presupuestal, los sectores Educación y Salud representan el 81% del presupuesto de Puno, con 50% y 31%, respectivamente. Es seguido por Transporte con 7% y los demás sectores con menos de 5%.
En Educación, el 80% del presupuesto corresponde a planillas; mientras que solo el 7% a inversiones en escuelas. Por otro lado, el 42% del presupuesto de Salud corresponde a planillas, el 29% a bienes y servicios y 28% a inversiones en hospitales.
En este marco, es importante reconocer que la economía de la región depende de la recaudación tributaria con 78%, seguida por canon, regalías y otros impuestos municipales con 19%, por lo que la producción regional es su principal sustento.
En ese sentido, Puno no puede permitirse paralizar sus actividades económicas por protestas o manifestaciones como las que se motivaron durante la última semana. Al encontrarse en un periodo de recuperación económica, luego de las protestas de enero y febrero, es crucial que las autoridades y los ciudadanos pongan sus esfuerzos en trabajar en favor de su región.